Las Palabras están siempre cargadas, nunca son neutras. Son herramientas y son arte, poesía a veces. Las Palabras transfieren conocimiento y, mediante la dialéctica y la mayéutica, nos ayudan a parir pensamientos. Nos estructuran la cabeza y nos ayudan a ser un poco más humanos. Y, sin embargo:
“No debe hacerse nada por el solo amor a las palabras, puesto que las palabras en sí mismas se inventaron por amor a los pensamientos”. (LEO STRAUSS)
En la búsqueda del acercamiento a cualquiera de los matices de la Verdad -ni siquiera a la Verdad misma-, se nos antoja evidente para todos el porqué de que las Tautologías sean siempre Verdades. Pero, ¿Cuál es la razón de que hable de Gritos? El caso es que hablo de gritos de placer o de dolor, gemidos que expresan emociones sin más, sin filtros, sin que las palabras medien entre ellas -las emociones, auténticas sin duda- y nosotros -seres de supuesta Verdad-.
Sigo queriendo Gritar, quizás porque sigo viendo figuras en las nubes. Pero ahora Gritaré con palabras de por medio. Quiero hacer de la Palabra el vehículo de mis pensamientos, y del Grito la emoción de autenticidad de lo que digo. Y es que no hay forma de usar la dialéctica y la razón, la lógica y el método científico (sobre todo si lo que nos interesa es la sociedad, el ser humano), que seguir teniendo muy presente la retórica y la espiritualidad, lo emocional y lo visceral. Años de positivismo y cientificismo no han valido para generar una auténtica Ciencia Política infalible… ni de lejos. Puede que vaya siendo hora de volver a pensar en lo uno con lo otro -y lo otro con lo uno-.
“En el cielo, por ese agujero de aguas oscuras, brotan animales monstruosos a los que no podríamos ni siquiera identificar con nombres. Seres muy activos e inextinguibles -han resistido la depuración y se meten en donde lo tienen prohibido- que, como los pájaros que remontan vuelos masivos y espirales, se presentan en ese escenario tan higienizado sin que nadie pueda impedirlo”
Así expresaba el Profesor Roiz algo que se me aparece ante los ojos con claridad desde hace tiempo: No podemos separar la espiritualidad del estudio de las sociedades porque está ahí, existe y seguirá existiendo. Hemos de tenerla en cuenta. Por mucho que tratemos de higienizar el pensamiento mediante el método y la razón (tan imprescindibles, por otro lado), nunca lograremos que en él deje de penetrar todo aquello que somos, incluidas nuestras pasiones.
Tan solo puedo sugerir gritando: En lugar de negar sin más parte de lo que nos conforma, quizás fuera interesante traer aquellos matices al presente y a la consciencia para poder trabajar también con ellos.
Tan solo puedo sugerir gritando: En lugar de negar sin más parte de lo que nos conforma, quizás fuera interesante traer aquellos matices al presente y a la consciencia para poder trabajar también con ellos.
Por fin alguien que grita sin hacer ruido, que puede obtener una verdad, la que sea, desde diversas posiciones o diversos enfoques.
ResponderEliminarSólo has de conseguir que el oído o la vista (sentidos que a veces parecen atrofiados) dejen que las palabras lleguen a los cerebros, si es que todavía quedan...
Enhorabuena por tu blog, estamos dispuestos a aprender...
Yo quiero aprender. Que mi garganta va y viene, ojos y oídos en igual línea. Tanteo a voces, sólo eso, que no es poco.
ResponderEliminarGracias Ric.